El juego tenía un precio

Lo que no logró la Armada Invencible
¡¡Lo conseguirá la Agencia Tributaria!!
¡¡Muahahahahahaha!

Trabajando en una tienda oyes todo tipo de historias. Algunas son divertidas, otras tristes. Otras son auténticos relatos de terror. Hace poco me contaron una que me puso los pelos de punta. O la cartera, para ser más exacto. Si fuera una película de miedo la llamaría Hacienda tiene ojos o algo por el estilo. Os pongo en antecedentes. Juan (nombre ficticio, por supuesto) es un coleccionista compulsivo de juegos de guerra. Llevaba meses esperando el Festung Budapest. Lo tenía en pre-pedido, por una cantidad ridícula. Por fín llegó el ansiado día y le llegó el correo de MMP diciéndole que su juego ya estaba en camino. Al comprobar el cargo en visa se dio cuenta de que entre gastos de envío y lo que había subido el dólar respecto al euro en los meses transcurridos desde que hizo el pre-pedido, el precio del juego se había disparado. Aún así no parecía demasiado grave, pensó Juan. En las tiendas españolas lo tienen anunciado a 109-117 euros, dependiendo de la tienda. Él había pagado 102 euros, entre pitos y flautas. No era tanto ahorro como había previsto, pero no estaba mal. Esperó pacientemente. Un día llegó el cartero con el paquete. Juan no cabía en sí de gozo, hasta que.... hasta que el cartero le dijo que el pedido llevaba cargas de aduanas. Eran 31 euros de IVA de importación, más 13 euros de gastos de gestión. En total 44 euros "¿Quiere pagarlos? ¿O devolvemos el paquete?" "Pago, pago" - musitó mi amigo con gesto descompuesto. Al final, la broma le había salido por 146 euros. "Bueno" -pensó Juan- "cuando se descatalogue valdrá mucho más... no es que vaya a venderlo, pero..." Y es que quien no se consuela es porque no quiere.

IVA de importación, aranceles y gastos de gestión


Cuando traemos algo de fuera de la Unión Europea tiene que pasar por aduanas. En teoría, los paquetes pequeños y con un valor declarado inferior a 100 dólares (¿Por qué usarán el dólar como criterio y no el euro? ¡Misterios inescrutables de la Agencia Tributaria!) no los paran. Digo "en teoría" porque a mi me han llegado a parar un paquetito del tamaño de una cajetilla de tabaco (eran figuras de 6mm) y cuyo valor no llegaba a los 50 dólares. Me lo dieron sin cobrarme "nada más" que 3 euros por hacerme el "favor" de tenerlo retenido en la oficina de Correos del centro de carga aérea de Barajas.

Venid a mis brazos, pequeñuelos

Los paquetes hermosotes, voluminosos, con pinta de tener cosas chulas dentro o con un valor declarado por el vendedor que supere los 100 dólares incluidos los gastos de envío, tienen todas las papeletas para que te los paren en Aduanas. Antes de que Frau Crisis nos golpeara con todas sus fuerzas, aún era posible que algún paquete se colase entre las codiciosas garras de la Agencia Tributaria y llegase sin cargas extras a tu casa. Ahora es casi un milagro el que no te lo paren y te breen a impuestos. Y es que al Estado le hace falta pasta y está dispuesto a sacarla de dónde haga falta.

Hay tres cargas que se aplican a un paquete que llega desde los EEUU (o China, o India, o el Cinturón de Asteroides). La primera es el llamado IVA de importación. Ahora mismo está en el 18% y se calcula contando el precio total del producto, esto es, el valor del bien más los gastos de envío. Por ejemplo, imagínate que pediste el Virgin Queen a GMT en pre-pedido. Creo recordar que eran unos 59$ o por ahí. Aduanas no calcularía el valor del juego sobre 59$, sino sobre ese precio más los gastos de envío, que rondaban los 24-38$ si la memoria no me falla (menos, si eliges la opción de que te lo traigan en barco, claro). Así que te pegarían el palo del IVA sobre 97$, que a día de hoy equivalen a unos 77€, más o menos, o lo que es lo mismo tendrás que pagar casi 14 euros de impuestos. Pero ahí no acabarán tus cuitas. Luego viene el arancel. A los particulares suelen aplicarles el 4,5% y no el 6% que nos cae a las tiendas. El arancel se paga, este sí, sobre el valor del producto sin los gastos de envío. Serán otros 2€ adicionales. Finalmente, la Agencia Tributaria te cobrará alrededor de 13 euros en concepto de gastos de gestión... a los que sumarás su IVA, por supuesto. El precio final superaría los 100 euros, cuando en cualquier tienda en Madrid no pasa de los 71 euros.

¿Pedir? ¿O no pedir? ¡He aquí el dilema!


La respuesta no es sencilla. Si tienes suerte y no te paran el envío en Aduanas, un juego en pre-pedido te puede salir bastante bien de precio. Ahora bien, si te lo detienen ya es otra historia. Como os decía arriba, la Agencia Tributaria se ha puesto las pilas este año. El Estado español tiene un déficit de mil pares de narices, así que el gobierno quiere recaudar. Además, de esa manera se disuade de comprar fuera de la Unión Europea. Por si fuera poco, al dólar lo están dopando con esteroides últimamente (ha pasado de cotizar a 1,38 en enero a los 1,24 que está ahora).

Generadores aleatorios de fluctuaciones de divisas - Marca Acme

Nuestro consejo es que no te dejes emocionar por las aparentes gangas. Haz bien tus cuentas. Comprueba todos los gastos extras que te van a aplicar, desde los que te calzan en origen (gastos de envío) hasta los que te aplicará tu banco por comisión de cambio de divisa (dependiendo del importe gastado pueden ser otros dos o tres euros adicionales). Intenta enterarte en las tiendas a cuánto va salir cuándo les llegue el juego. Si a pesar de todo eso te sigue saliendo más barato ¡o simplemente te mola la idea de recibir un paquete desde EEUU! entonces ¡Compra fuera!

Pero si prefieres pasar un buen rato charlando con gente que comparte tus mismas aficiones y si te gusta ver y sentir el juego antes de comprarlo... entonces vete a una tienda física ¿Quién sabe? Igual hasta lo disfrutas más. Alguna ventaja tenían que tener las tiendas físicas ¿no os parece? Y es que no es oro todo lo que reluce en Internet.

¡Que Fortuna os sea propicia!